Del 1º. de enero al 16 febrero de este año 2012, se han notificado cuatro mil 884 casos y 149 defunciones por los diferentes tipos de virus de influenza; de éstos, cuatro mil 440 (91 por ciento) fueron contagios y 135 (91 por ciento) decesos por el virus A-H1N1, debido a que desde el inicio del año predomina este virus estacional, informó la Secretaría de Salud (SSa).
La dependencia federal precisó que el 50 por ciento de las muertes por la influenza se trató de personas que habían sido hospitalizadas a partir del cuarto día de inicio de la enfermedad, además de que el 89 por ciento no estaban vacunadas y el 75 por ciento tenía una comorbilidad, es decir, otros padecimientos, de los tres más frecuentes: diabetes mellitus, obesidad e hipertensión arterial.
Al dar a conocer el monitoreo semanal, destacó que en la última semana se notificaron 60 defunciones confirmadas de influenza, sin embargo, aclaró que solamente 12 (20 por ciento) ocurrieron en la última semana.
Las 48 muertes restantes son de semanas previas, lo que resulta de los procesos técnicos de confirmación que incluyen la toma de muestra, procesamiento en laboratorio, emisión de resultados y notificación de los mismos.
La SSa, reportó que en el mismo lapso de tiempo, en el Estado de Aguascalientes se confirmaron 46 casos de influenza y una defunción.
Explicó que, la mediana de la proporción de consultas por infección respiratoria aguda grave en las Unidades de Salud Monitoras de Influenza fue de 10 casos por cada mil consultas en la quinta semana de 2012.
Al tiempo que la proporción de muestras que resultan positivas al virus de influenza disminuyó en 33 por ciento en las últimas cuatro semanas, por lo que reiteró las recomendaciones para aplicar las medidas preventivas de higiene y de prevención de la salud.
Actualmente, en México circulan los tres virus estacionales de influenza: A(H1N1), A(H3N2) e influenza B; la vacuna contra la influenza incluye protección contra estos tres virus estacionales.
Entre las medidas preventivas para disminuir la incidencia de enfermedades respiratorias están la de reforzar las defensas de los niños y ancianos con alimentos y complementos altos en vitamina C y D (frutas y verduras), así como abundantes líquidos.
Abrigarse bien al salir, usando varias capas, especialmente a niños y adultos mayores; evitar las prendas ajustadas y de tela sintética; si se permanece mucho tiempo en un lugar caliente, tapar la boca al salir; cubrir los lugares donde puedan entrar corrientes de frío; lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón o usar alcohol gel.
No auto medicarse y, en caso de presentar datos de alarma (fiebre por más de cinco días o dificultad para respirar) acudir a recibir atención médica; no permanecer en lugares donde haya humo de cigarro y, en general abstenerse de fumar, evitar la exposición a contaminantes ambientales, acudir a los albergues locales cuando se avise de frío intenso, si la vivienda tiene techos o paredes delgadas.
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